What men call the shadow of the body is not the shadow of the body, but is the body of the soul.
OSCAR WILDE
Aunque sé que me esperas y que te debo algo,
no voy a ir.
Es demasiado tarde y tengo el cuerpo
lleno de cicatrices,
no creo que te gustara.
He recorrido sola los océanos del mundo,
buceando entre sus senos de arena suave y blanca,
donde no llega el sol,
donde seres larvarios, casi ciegos
(ver no sirve de nada)
se arrastran aplastados
por el enorme peso del abismo.
Donde las gaviotas arrebatan,
ligeras y rapaces,
pececillos de oro al borde de las olas.
Donde se desmoronan las orillas
cavadas por los ríos,
que vierten la dulzura fragante de sus aguas,
en el amargo mar.
Llevo en mi corazón melenas verdes
de algas y caracolas,
nácares y corales de otras playas.
Me abruman la nostalgia y el deseo,
pero no voy a ir.
No quiero que tus ojos
me miren otra vez.
No sabría qué decir cuando me vieras
abrazada a la sombra que vendiste
hace ya tantos años a esa bruja.
Espérame si quieres, no voy a devolvértela.
Abril 1998
Comentarios recientes